> “Una vida consagrada a obtener algún tipo de seguridad por lo que se refiere al tiempo, cuando esa seguridad es inalcanzable, no puede más que parecerte provisional; como si la razón de haber nacido siguiera estando en el futuro, más allá del horizonte, y tu vida, en toda su plenitud, solo pudiera empezar cuando todo estuviera, en la expresión de Arnold Bennett, «en perfecto orden de revista». Cuando hayas completado todas tus tareas pendientes, te dices; o cuando hayas puesto en marcha un sistema de organización personal mejor que el que tienes ahora o cuando te gradúes o cuando hayas dedicado una cantidad suficiente de años a aprender tu oficio...” Oliver Burkeman en “Cuatro mil semanas”. Traducido por Ana Camallonga.